¿Profesor o coach?
Últimamente hay un movimiento de Coaching importante a nivel global. Seguramente has escuchado acerca de este fenómeno, y tienes algo de idea de qué trata. Sin embargo, es muy común cuestionarse acerca de la diferencia entre un profesor y un coach, según sus definiciones. Se entiende por profesor a una persona que tiene por oficio impartir conocimiento, mientras que un coach es un entrenador de habilidades. El momento en que entendí esa diferencia, supe que nunca había sido una profesora, sino una coach. Pues mi trabajo siempre se ha basado en brindarle a mis estudiantes las herramientas para que ellos logren potenciar sus habilidades y ganar conocimientos. Quiero aclarar que los dos términos no son excluyentes. Es más, conozco muchas personas en el ámbito de la educación que son coaches, más que simplemente profesores. De esta manera, te quiero compartir tres razones por las cuáles deberías trabajar con un coach, no un profesor:
1. ¿Conocer o aprender?
Existe una enorme diferencia entre fomentar el aprendizaje e impartir conocimiento. No es lo mismo que yo te cuente cómo aprendí a pescar, dándote todos los pasos y explicaciones técnicas acerca de cómo hacerlo; a que vaya contigo a pescar, te de todos los instrumentos y te acompañe en tu proceso. Eso diferencia a un coach de un profesor. Los coaches te van a brindar todas las herramientas para que tú mismo descubras la mejor manera para lograr un verdadero proceso de aprendizaje, potenciando tus habilidades y logrando tus propias metas. El alumno del profesor puede conseguir el mismo conocimiento del profesor, mientras que el coachee del coach podrá superarlo siempre.
2. ¿Planificación o libro guiado?
Muchas veces los profesores utilizan un libro estandarizado para guiar sus clases y enseñar en base a eso. Por otro lado, los coaches diseñamos una planificación personalizada que tiene el objetivo de desarrollar las habilidades que el coachee necesita para lograr sus metas, según sus necesidades particulares. De esta manera, la experiencia es inmensamente satisfactoria y única, tanto para el coach y el coachee. Los resultados, además de lograrse en menor tiempo, son incomparables.
3. ¿Cumplimiento o motivación?
Para un profesor, cumplir los objetivos que un libro guiado le da es la meta; mientras que para un coach, la motivación constante de sus coachees es la base del proceso. Es primordial para un coach asegurarse de que cada uno de sus estudiantes estén logrando resultados que le brinden satisfacción, que cada sesión le dé herramientas que le hagan acercarse a sus metas, y que no se rindan hasta que cumplan sus objetivos.
Como podrás ver, existen mil razones por las cuales un coach es lo que necesitas para cumplir tus metas. Existen muchos coaches disfrazados de profesores, y esos son los que seguramente dejaron huellas en tu vida desde niño. Si quieres aprender o mejorar tu inglés, te recomiendo que lo hagas de la mano de un coach y notarás cómo logras verdaderos resultados, en menor tiempo, y estando motivado al máximo.